Publicado por Ayuburí en 17:49
Miré de reojo en un principio.
Corrí, y en un instante me sorprendió de frente.
Había llegado. Lo iba a esperar.
Volver a verlo fue un dejabú de ese tierno ayer.
Tan simple como siempre había sido,
con ese brillo tan propio y esa postura tan fiel y correcta.
Miré detalladamente sus movimientos,
y rompí mi corazón sin necesidad de hacerlo.
Volví a correr,
y corrí lo más rápido que mi cuerpo y mente me permitían hacerlo.
Retomé mi camino, mirando por el rabillo del ojo si él seguía ahí,
y para mi gran sorpresa estaba...
Supe entonces que, por mas distancia y tiempo entre nosotros,
con solo mirar de reojo, iba a poder encontrarlo...
porque siempre iba a estar a mi lado.
¿Saldré? ¿Llegarás?
¿Qué voy a hacer?
¿Qué es lo que harás?
¿Llegaré? ¿Saldrás?
¿Qué vas a hacer?
¿Qué es lo que haré?
Llegaste y me fui.
Me fui y te quedaste.
Te quedaste y me dormí.
Te quedaste y me fugué.
Te quedaste y lloré.
¿Qué vas a hacer?
¿Llegaras?
¿Que vas a hacer?
Me arrepentí…
¿Qué voy a hacer?
Voy a escapar
¿Me seguirás?
Me fui.
Te quedas.
¿Qué vas a hacer?
Vas a escapar.
¿Correré detrás?
Muero por encontrarnos.
Muero por odiarnos.
Vivo para encontrarte.
Vivo para amarte.
Vivo. Muero. Llego. Escapo.
Muero, te sigo y vivo.
Te sigo y huyo.
Te sigo y espero.
Publicado por Ayuburí en 13:42
Powered by WordPress
©
Cuando Termines Vemos - Designed by Matt, Blogger templates by Blog and Web.
Powered by Blogger.
Powered by Blogger.